Congresos Cristianos Requieren de una Capacidad Especial para su Organización

Los Congresos Cristianos, son un reto para los Organizadores Profesionales de Eventos. Se diferencian de cualquier otro tipo de congreso porque poseen características muy particulares que los hacen acreedores de un tratamiento especial, es decir, requieren de un conocimiento muy propio y experiencia vivida en su realización, para poder planear, programar y ejecutarse con relativo éxito. En su mayoría sus organizadores son gente formada en sus propias iglesias. 

Foto de Samuel Pereira en Unsplash

No se necesita ser médico para planear un congreso médico, pero, para organizar un Congreso Cristiano, se necesita ser creyente para saber que se tiene que ser abnegado a la voluntad y propósitos de Dios, y que la planeación y acciones del mismo, podrían ser modificadas por Él.
 
A continuación comentaré algunas razones y peculiaridades de estas reuniones, que como Organizadores Profesionales tenemos que tomar en cuenta.
 
Los cristianos congresistas son personas unidas por su fe, que sostienen con certeza una relación íntima con Dios, el cual, puede decidir a última hora el rumbo de un congreso. Puede ser que un predicador conferencista designado participe o no, o que los tiempos programados se desfasen; hoy en día es común escuchar a predicadores decir con seriedad -“Dios me dijo que no asistiera”, “Dios me cambió el mensaje”, “Dios nos mando a realizar algunas acciones”-, situaciones que pueden cambiar el curso de un congreso, o que tengamos que efectuar modificaciones y adiciones en sus actividades.
 
Su concurrencia es multitudinaria, siendo común que se reúnan cinco o siete mil congresistas, en algunos países se han congregado en un evento más de tres millones; con un universo de edades, donde participan niños, jóvenes, adultos, de diferentes profesiones y posiciones económicas. Son congresistas que están homologados por su fe, que asisten con mucha disposición y con una gran expectativa en busca de transformar sus vidas. 
La realización es recomendable que sea en lugares céntricos de las ciudades, que las personas no pierdan tiempo en trasladarse del lugar sede a hoteles o restaurantes.
 
Considerando que la oferta hotelera de la zona pueda ser insuficiente, que los lugares de venta de comida deban estar a precios accesibles, en ocasiones será necesario disponer de áreas de comida adjuntas al sitio del evento. La norma es que los congresistas prevean por su cuenta sus reservaciones y comidas.
 
La pasión y motivación con que asisten los congresistas cristianos y su número, la debemos tomar en cuenta para el manejo y control de masas durante y después del evento, para establecer la seguridad de predicadores conferencistas y de los propios congresistas, como en los accesos y salidas, tiempos de receso y horarios de inicio a fin del evento.
 
Por último y respecto a los stands para la venta de artículos, es importante considerar su suficiencia, ya que los cristianos son infalibles consumidores de libros y de todo tipo de materiales cristianos.
 
Muchas gracias y recuerden;  Dios les bendice siempre.
 

Sobre el autor:

Orlando Sánchez Luna
Alumno Noun Eventos & Capacitación Ejecutiva
Campus México Abril 2012
www.nouneventos.com.ar